REACCIÓN DEL SECTOR EMPRESARIO AL DISCURSO DEL PRESIDENTE

Desde la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM), celebraron el éxito del plan macroeconómico y el anuncio de apertura de importaciones, pero advirtieron ciertos recaudos. Además, pidieron "motosierra profunda" de los costos ocultos y los “curros” encubiertos en las paritarias, como el aporte obligatorio por capacitación, que encarece los costos laborales y que hay que pagar aunque los empleados no se capaciten nunca.


En un profundo análisis sobre los alcances del plan de gobierno y las medidas anunciadas anoche por el presidente de la nación, Javier Milei, en su discurso de balance de su primer año de gestión, los empresarios mayoristas señalaron los puntos que impactan directamente sobre un sector clave, que concentra más del 60% de las ventas de productos de consumo masivo de primera necesidad y abastecen a 140 mil almacenes, perfumerías, tiendas de limpieza y 20 mil autoservicios, aproximadamente, que captan las compras del día a día, que son las requeridas por las familias de menores recursos.

Entre los ejes del discurso, los empresarios destacaron éxitos, pero también pidieron terminar con “curros” y “costos ocultos” que encarecen el costo argentino.


Éxitos:

 

Sobre las medidas anunciadas:


facturar en cualquier otra moneda): Resulta indispensable terminar con el cepo para poder operar como un país normal. En cuanto a la facturación en otras monedas, entendemos que es lo que la gente votó para poner fin a la inflación e integrarse al mundo.

Entendemos que la eficiencia de la industria local se consigue con baja de impuestos y baja de aranceles, no con protección.

Tomando este parámetro, y el monto obligatorio que aporta el empleador, que en Diciembre fue $4492,01, recaudarían unos $65 mil millones por año con el fin de "capacitar", y el empleador debe aportarlo todos los meses aunque su empleado no se capacite nunca. La millonaria caja la administran ciertos gremios empresarios que integran la mesa paritaria. "Resulta inadmisible que con cada aumento paritario los beneficiarios sean ellos mismos, tocando así el bolsillo de todos los comerciantes para que junten cajas millonarias de las cuales no hay rendición de cuentas públicas".